las más grandes compañías de telecomunicación de EE. UU. AT&T adquiere a su competidor – el operador móvil T-Mobile. La nueva entidad contará con unos 130 millones de abonados al adelantar al líder del segmento Verizon Wireless con 94 millones de suscriptores.
Bajo el acuerdo AT&T pagará al propietario de T-Mobile, la alemana Deutsche Telecom unos 39.000 millones de dólares de los cuales 19.000 millones en efectivo y otros 25.000 en forma de acciones.
Como resultado, Deutsche Telecom recibirá el 8% de participación de American Telephone and Telegraph (AT&T) que le dará derecho a un asiento en el consejo de administración del gigante en telecomunicaciones.
Si el acuerdo es aprobado por los reguladores antimonopolio, en el mercado de la telefonía móvil se presentará un verdadero “monstruo”, el segmento corre el peligro de convertirse en un duopolio. Mientras que el tercer mayor en telecomunicaciones del mercado Sprint Nextel tiene solamente 50 millones de abonados.
En un comunicado AT&T indica que en EE. UU. surgirá una red inalámbrica más extensa y confiable con internet de alta velocidad LTE (Long Term Evolution) en las zonas rurales, uno de los más importantes objetivos de desarrollo socio-económico del país, según el presidente Barack Obama.
Los analistas indican que la adquisición del competidor cuya red opera sobre la base de los mismos estándares GSM/UMTS (Sistema Universal de Telecomunicaciones Móviles) fue la única oportunidad para AT&T de mejorar rápidamente la calidad de servicio.
Debido a la conclusión del acuerdo con Apple en 2007 que supone la venta de iPhone con el contrato AT&T, el operador consiguió incrementar considerablemente su base de suscriptores pero no logró mantener la alta calidad de las llamadas y transmisión de datos. Al integrar en su red la infraestructura mucho menos cargada de T-Mobile, la compañía podrá ofrecer a los clientes un mejor servicio y concentrarse en la construcción de redes de cuarta generación.
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