En el Oriente Lejano ruso, el segundo prototipo de un avión de caza de quinta generación, denominado provisionalmente como T-50, pasó con éxito las pruebas. Durante su primer vuelo alcanzó una velocidad superior a los 2.000 kilómetros por hora, y no es el único logro de los investigadores.
El avión de caza, conducido por el piloto de pruebas Serguéi Bogdán, despegó desde el aeródromo de la empresa Sukhoi en Komsomolsk del Amur y permaneció en el aire casi una hora. El vuelo transcurrió sin incidentes.
El aparato de 30 toneladas de peso deberá efectuar otras 40 salidas y para este mismo año se prevé la terminación de un tercer modelo de T-50 que también se sumará a los vuelos de pruebas, según indicó Mijaíl Pogosián, director general de Sukhoi.
Especialistas señalan que este segundo modelo de aviones T-50, posee una serie de particularidades sin precedentes. El caza de fácil pilotaje es invisible para los radares. Además necesita un mínimo recorrido para el despegue. Y gracias a un complejo sistema de recarga de combustible en el aire, es capaz de realizar vuelos cubriendo una distancia de 5.500 kilómetros antes de ser nuevamente recargado.
El primer T-50 realizó su primer vuelo de 47 minutos de duración el 29 de enero de 2010 en el extremo oriente de Rusia.
El avión de caza, conducido por el piloto de pruebas Serguéi Bogdán, despegó desde el aeródromo de la empresa Sukhoi en Komsomolsk del Amur y permaneció en el aire casi una hora. El vuelo transcurrió sin incidentes.
El aparato de 30 toneladas de peso deberá efectuar otras 40 salidas y para este mismo año se prevé la terminación de un tercer modelo de T-50 que también se sumará a los vuelos de pruebas, según indicó Mijaíl Pogosián, director general de Sukhoi.
Especialistas señalan que este segundo modelo de aviones T-50, posee una serie de particularidades sin precedentes. El caza de fácil pilotaje es invisible para los radares. Además necesita un mínimo recorrido para el despegue. Y gracias a un complejo sistema de recarga de combustible en el aire, es capaz de realizar vuelos cubriendo una distancia de 5.500 kilómetros antes de ser nuevamente recargado.
El primer T-50 realizó su primer vuelo de 47 minutos de duración el 29 de enero de 2010 en el extremo oriente de Rusia.
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