La ejecución de Teresa Lewis siembra polémica en Estados Unidos y conmoción en buena parte del mundo. En especial, porque se trata de una mujer, madre y abuela. La sentencia se ha ejecutado pese a los miles de peticiones de clemencia que ha recibido el gobernador del Estado de Virginia. Una inyección letal ha terminado con su vida. Su defensa siempre ha sostenido que se le debÃa conmutar la pena, ya que su coeficiente intelectual rozaba el lÃmite legal del retraso mental:
“Esta noche la máquina de la muerte en Virginia ha apagado el espÃritu bello, infantil y lleno de amor de Teresa Lewis. Para su familia y amigos, para sus compañeros internos de la prisión, para los miles de personas que la apoyaban en Virginia, en Estados Unidos y en todo el mundo, su muerte es una trágica pérdida”, señalaba su abogado Jim Rocap.
Lewis se encontraba en el corredor de la muerte desde 2003, cuando se declaró culpable de haber ordenado a dos hombres, uno de ellos su amante, que asesinaran a su marido y su hijastro en 2002.
Ella pasará a la historia como la primera mujer ejecutada en el estado de Virginia en casi cien años, la primera en todo estados Unidos desde 2005. En este paÃs, más de 3.200 presos esperan su ejecución en el corredor de la muerte. De ellos, sólo 52 son mujeres. Está por ver si la de Teresa Lewis abre la puerta a otras ejecuciones femeninas.
Agencias
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